lunes, 18 de mayo de 2009

Que suban las apuestas...

Al final me doy con la verdad en la frente. Lo que me negaba a creer se me presenta tan evidente que no puedo hacer nada más que admitirlo. ¿Será que realmente soy una tonta?. Se han hartado de llamármelo y yo hasta hace tan solo unos minutos me lo había tomado como una broma. Se acabó, “game over”, y esta vez, aunque me cueste reconocerlo he sido yo quien ha perdido la partida.
Respeto, es lo único que pido, lo único que necesito, y ni siquiera eso parezco merecer. Una tarde semiperfecta, en la que me había vuelto a engañar a mi misma con una verdad a ciegas, y me encuentro en mi encrucijada particular, una llamada que no se produce seguida de un encuentro ocasional que no llego a comprender. Un abrazo cariñoso de despedida en la puerta de un portal al que yo no estaba invitada. Un abrazo que significaba una cita que yo no consigo tener. Un abrazo que aumentaba mis dudas. Un abrazo que dejaba al descubierto las cartas de un jugador de póker profesional aficionado al farol. Y el problema ahora es… ¿doy por terminada la partida?. Una vez descubierta la estrategia lo difícil es saber como jugar tus cartas. ¿Acepto el farol y abandono o subo la apuesta?, yo también se marcarme un órdago a la grande llevando la mano llena de ases. Pero ¿merece la pena seguir con la partida cuando de antemano sabes que juegas con un farsante? Puede que juegues con ventaja, pero ¿hasta que punto serás capaz de mantener la estrategia sin perder la cabeza?
Puede que ni siquiera se este marcando un farol, puede que desde el principio haya dejado sus cartas sobre la mesa y haya sido yo la que haya malinterpretado la jugada. Puede que haya visto proyectados en él mis propios sentimientos. Como suele ocurrir puede que haya visto sólo lo que quería ver. Y esta ronda prefiero mantener al margen mis comodines.

4 comentarios:

  1. Yo cambiaría a la plantilla, (enterita) cara mía.. ya sabes,buscaría a unos de una altura digamos más acorde... que lleguen a los rizos de la prota... que se lo merece.

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  2. ya cara mia, pero es que tu eres un jurado muy poco objetivo, a la par que exigente :)

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  3. Sí, es dificil saber como jugar habiendo descubierto el farol.
    Desde este mometo no es otro jujador, es el contrincante, pero que no se de cuenta, que jode más que crea que está ganando y hacerle ver qeu no conoces el farol.
    Luego zas, enseñas tus ases de sopetón.

    Yo apuesto

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  4. Vamos a ver si lo de cambiar a la plantilla, que no vale ni para reservas, lo llevamos a la práctica, que mi salernitana favorita no cuaja con príncipes de plastilina.

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