No hay día que no piense en
ti. No hay día que no busque una
excusa para escribirte o que no sueñe con encontrarte por
casualidad. Y pienso en ti pero eso no me pone triste, despierta mi parte más
emocional en la que la
aventura es lo único que me hace sentir bien. Un año de juegos, de
cal y arena, de ahora tú y luego seré yo... han pasado ya 4 meses desde que te pedí que me dejaras
volar libre y no se por qué pero sigo echándote de menos.
Hoy estoy escuchando una
canción que oía siempre en tu coche y tengo aún más ganas de
saber de ti. Fui yo la que puso el punto y
final, aunque no sé si con la
esperanza de que tu reacción fuera otra, así que hoy te dedico mi post con todo lo que te diría si
pudiera hacerlo:
"Gracias por tomarme en serio aunque haya significado no volver a verte, por volverme loca, por hacerme sentir desde lo más profundo de mis entrañas, por despertar la pasión perdida, por hacerme reír y llorar. Gracias por hacerte dueño de mis pensamientos, por alegrarme con estupideces y entristecerme con desprecios, por no dejarme ir pero tampoco quedarme, por quererme aunque fuera a tu manera... pero sobretodo, gracias por devolverme a la vida.
Gracias Melón por ser mi Mr. Big".
Creo que mi rizosa tenía razón... igual me había enamorado
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